Hoy es para mí, que he servido en la Guardia Civil, que he llorado y rezado ante tantos compañeros caídos en acto de servicio por las balas asesinas de ETA, que he visto el dolor y el desconsuelo que invade a las familias que se quedan solas, que sufrí, como todos nosotros, los entierros clandestinos de otros tiempos, ¡por no molestar!, que me mordí los labios con rabia inusitada cuando estos asesinos surgidos de las alcantarillas volaron la Casa Cuartel de Zaragoza sin reparar en que allí vivían mujeres y niños, un día triste y doloroso.
No entiendo a quienes, desde la comodidad de las sedes lujosas, de los despachos maravillosos que pagamos todos, pueden decir que Sí a la legalización de un partido político que para todos es ETA, que es la máscara legal de ETA, que brinda su apoyo a ETA y que, estoy seguro, sirve a la estrategia de ETA. No entiendo unas leyes que permiten semejante desatino. Tengo que estar hoy con mis compañeros que han trabajado lo indecible a la hora de aportar las pruebas fehacientes de lo que todos sabemos, de lo que es público y notorio cuando estos individuos salen a la calle, que Bildu y Batasuna son lo mismo.
Hoy, estoy seguro, todos los que hemos servido en la Benemérita y todos los que sirven, con rigor y disciplina, nos sentimos un poco huérfanos, traicionados por un Estado al que hemos servido y otros aún sirven con honor.
No quiero cerrar estas líneas sin dejar claro que si la legalización de Bildu ha sido posible es porque las leyes lo permiten; leyes avaladas por los dos partidos políticos que dirigen la vida política nacional. No sé de qué se quejan algunos, no sé de qué cosa disiente el señor Rajoy. Leyes tan alabadas como las que han puesto en libertad, estas semanas, a varios terroristas y ante las que me digo ¡Qué barato sale matar a un español en España!
Francisco Muñoz Alias. Cabo Primero de la Guardia Civil jubilado y candidato por Alternativa Española a la Presidencia de Melilla.
Melilla, 6 de Mayo de 2011
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